martes, 9 de noviembre de 2010

Rechazo a toda clase de discriminación y de prejuicios frente a la mujer

Gracias a Ljudmila Hribar, por su post Homenaje a Jutta Burggraf : Juan Pablo II y las mujeres, del cual, me gustaría hoy, copiar sólo dos párrafos. Y hacerles ver que este cambio es reciente, que Juan Pablo II es contemporáneo nuestro y que queda mucho por hacer en el campo del respeto a la mujer, a su dignidad, a su igualdad...

Hay que romper tradiciones, porque -a diferencia de lo que opinan demasiados conservadores- no todas las tradiciones son buenas. Y esto se aplica, no sólo al llamado tercer mundo, sino muy especialmente, a Europa (especialmente a Alemania y quién sabe a qué otros estados), donde me consta que los prejuicios frente a la mujer son omnipresentes.

Como lo hizo ver, hace ya tiempo, la misma Jutta en su artículo Zerstört Der Feminismus die Familie? (2° párrafo) que, si mal no recuerdo, publicamos en... ¿Humanitas?



Juan Pablo II rechaza toda clase de discriminación y de prejuicios frente a las mujeres. Rompe no sólo con el protocolo, sino con una antigua tradición, que creía comprobar la inferioridad moral y espiritual de la mujer, y por esta razón, le impedía adoptar decisiones importantes, y exigía que la esposa se sometiera incondicionalmente a su marido y señor.


Estas disposiciones restringían la libertad de la mujer, y podrían ofender mucho. No obstante, también afectaban al varón: porque, en cuanto éste se sujetaba a tales normas, renunciaba a una auténtica amistad y colaboración con la mujer. En vez de amiga, tenia una esclava. Juan Pablo II pone de manifiesto que la injusticia que sufre la mujer, hiere y daña profundamente, no sólo a ella misma, sino también al varón.

2 comentarios:

Ludmila Hribar dijo...

Gracias Marta. Un abrazo

Marta Salazar dijo...

gracias a ti! sigamos siendo rebeldes :)