sábado, 11 de mayo de 2013

Mujer, piensa en tu dignidad y hazte respetar...


Agradezco la imagen (de febrero de 2012) a Wikimedia y a A01321718 Representa la Mujer Huautla (ciudad del distrito de Teotitlán, en México).

Conversaba con una amiga sobre de la exigencia que se plantea muchas veces acerca de la dignidad de la mujer, en un contexto en que se le ve dirigido sólo a la mujer. Sí, la mujer tiene que tener conciencia de su propia dignidad y comportarse como tal: vestirse correctamente, pintarse correctamente, comportarse correctamente... se dice con mucha frecuencia.

Aparte de que lo que es correcto es algo relativo, ya que, sin caer en el relativismo, todos, o más bien, todas somos distintas y lo que para mí es correcto puede no serlo para otra mujer... Y de hecho, no lo es, me consta.

Poniendo entre paréntesis las diferencias entre diversas maneras de apreciar la corrección y la incorrección, y entre distintos márgenes de tolerancia frente a la diversidad (apariencia o costumbres), me gustaría poner de relieve que la dignidad de la mujer implica también -y no en último término- que la mujer se haga respetar a sí misma y también que el hombre la respete.

Y, por favor, que sea respetada no sólo por su apariencia... Algunas veces me da la impresión que grupos insinúan que una mujer que no se vea como ellos consideran correcto no es digna de respeto. Una mujer vestida de tal o cual forma incorrecta sería -para ellos- una mujere que no merece respeto... No senores y senoras! Toda mujer, todo ser humanos es un hijo/a de Dios y por tanto, merece todo nuestro respeto. Independientemente de cómo ande vestido/a. En esto, creo que no se puede transar.

Asimismo, el respeto a la mujer no es sólo un respeto tipo sexual... No es sólo hay que respetar su sexualidad... Lo que se sobreentiende y no veo que, en el siglo 21, haya que seguir insistiendo en ello. Educando en este sentido, sí... aquí sí falta mucho camino. De repente me temo que, en sociedades con poca cultura, se sostiene que "si la violan es por provocar a los hombres"... y horribles frases similares...

Sin embargo, sobre todo, respetarla en su dignidad como persona, lo que indudablemene, también comprende su cuerpo. Pero yo voy más allá: respetar el cuerpo de la mujer (o del hombres... y mejor ni mencionar el respeto sagrado al cuerpo del nino, sobre todo, después de tanta pedofilia que hemos visto durante los últimos anos...) es algo evidente, que nadie puede poner en duda ya.

Pero voy más allá: respetarla como ser pensante, como ser racional, como ser libre y que toma sus propias decisiones. Escuchar su opinión, tomarla en serio y no verla como un simple adorno o apéndice del marido. Que es lo que lamentablemente se ve en alguos grupos sociales...

Respetarla como colega de trabajo a la que no se discrimina, como ciudadana con derecho a voz y a voto; como creyente, cuyas convicciones religiosas son respetadas y no tiene que "cambiarse" a la religión o confesión a la del marido (lamentablemente, lo he visto mucho). Este es un ámbito en el que hay que hacer mucho, mucho más...

Partir por decirle a las mujeres: mujer, piensa en tu dignidad y hazte respetar... Y a los hombres: hombre: respeta a la mujer como a tu igual!

No hay comentarios: