martes, 18 de agosto de 2015

También las palabras pueden matar...



Even words can kill es el lema de la campana que comenta el artículo del mismo nombre, del grupo Armando Testa (agencia publicitaria italiana) y de Famiglia Cristiana (revista de inspiración católica, igualmente italiana, fundada en 1931 y cuyo lema es "Famiglia Cristiana non dovrà parlare di religione cristiana ma di tutto cristianamente").

"Nigger. Terrorist. Thief. Fatty. Four words, four insults which hit hard like a blow to the head. Whispered or shouted they can wound people more than we might imagine". Sí, tal cual como en el derecho penal (y en la ética), hay autores intelectuales de grandes crímenes.

No es sólo la persona que aprieta el gatillo o que pone la bomba, la única culpable. También es culpable quien incita a cometer un crimen. Como lo escribí en más de una oportunidad acerca de Carlos Andrés (ver también mi reacción, el 2011, al atentado terrorista y criminal: La influencia en el "Manifesto" de Breivik).

Negro. Terorista. Ladrona. Gordo. En realidad, las cuatro voces son despectivas; pero no me parece que sea de la misma entidad decirle a alguien "gordo grasa" que terrorista... En ambos, casos, eso sí, hay discriminación. Y me temo que en algunos países que una persona -especialmente si es mujer- sea gorda pueda ser considerado tan malo como ser ladrona.

El objetivo de la campana es mostrar que estas"cuatro palabras, cuatro insultos que golpean duro como un golpe en la cabeza. Susurrarlas o gritarlas puede herir a la gente más de lo que podríamos imaginar". Es cierto.

Y continúa el artículo enlazado y que comento: "Esta es una campaña creada por Armando Testa para sensibilizar a toda la población, y en particular a los jóvenes, sobre la cuestión del racismo y la discriminación".

Se presenta visualmente (sí, los italianos son Augenmenschen :) ) a cuatro personas: uno hombre africano, una mujer gitana, un árabe y un joven gordo. Estas personas son catalogadas de "negro" (nigger es voz despectiva; menos que el Negger alemán), ladrona, terrorista y gordo graososo. estas son palabras que se dicen a la ligera en cualquier parte.

"Sus cráneos están perforados por lo que podría ser interpretado como una bala, pero en realidad es una palabra, entrando por la izquierda y que luego sale por la derecha, destrozándolo. Esto demuestra el poder destructivo de un insulto, del prejuicio racial o de la ironía discriminatoria".

Sé que muchos dirán que esto es parte de la dictadura del politicall correctness o del main stream. Sinceramente, me da lo mismo que los defensores de la discriminación y el racismo (cotidiano o duro) lo sostengan. Se defienden como gatos de espaldas de quienes intentamos dejar a nuestros hijos un mundo mejor.

"El texto pone de relieve el significado de la campaña: "Anche le parole possono uccidere" (Incluso las palabras pueden matar) No a la discriminación, la otra persona es igual que yo". Pienso que este es el fundamento de la no discriminación: que somos iguales. Si queremos ir más allá, estoy convencida que somos hij@s de un mismo Padre, de Dios creador y por tanto, herman@s.

Los autores de la campana -se explica- describen, desde el interior, el dolor que muchas personas experimentan cuando se las considera diferentes. Con sólo una imagen impactante y esencial, una clave visual en perfecto estilo de Armando Testa, cuenta la historia de cómo muchos de los marginados se sienten atacado por los prejuicios y por la superficialidad culpable de muchas personas, como lo demuestran lamentablemente muchos noticia, incluso las más recientes". Sólo puedo dar las gracias a los autores.

La campana cuenta con el auspicio y el apoyo del grupo Armando Testa y de Famiglia Cristiana, también de Avvenire (diario católico, independiente de la Iglesia; pero con gran influencia de ella) y Fisc, "así como un sinnúmero de organizaciones sin fines de lucro que apoyan la iniciativa". Se espera que las imágenes "sean publicadas en internet, en colegios, en salones parroquiales y centros comunitarios".

Muchas gracias a mi amigo Pato (amigo de toda la vida, de Chile) que posteó el tema hoy en Facebook. Así son mis amigos :)


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos Martha.
Soy Andrés de Venezuela.
De Famiglia Cristiana tiene una versión en español Familia Cristiana, por cierto la publican en Caracas, Venezuela.

Anónimo dijo...

Saludos Martha:
Otra cosa: Sobre las palabras que matan, en relación a las teorías de conspiración paranoicas, mira quien compartía esa afición:
http://worldobserveronline.com/2015/06/01/bin-ladens-bookshelf-included-911-conspiracy-material/